Don Quijote descansaba encamado,
Mientras Sancho Panza salió de allí
Muy alborotado.
Sancho avisó de lo que ocurría al cura
Y al ventero,
Porque Don Quijote se creía un gran guerrero.
Quijote estaba sonámbulo y
Luchando contra odres,
Pero Quijote pensaba que luchaba con
Gigantes enormes.
El ventero al ver el desastre se enojó,
Y un gran alboroto causó.
El ventero y el cura deseaban que
Don Quijote se marchara,
Y tramaron un plan para que no les
Reconocieran la cara.
Les salió bien el plan que habían pensado,
Y Don Quijote derrepente despertó sobresaltado.
Estaba en una jaula encerrado,
Tirada por bueyes y atado de pies y
Manos.
Llegaron al pueblo pasados seis días,
Y entraron en la aldea a mediodía.
La sobrina y el ama más tarde decían,
Malditos sean los libros de caballería.